El vendaje funcional engloba tanto el uso de kinesiotape o kinesiotaping (también conocido como vendaje neuromuscular) así como del tape o taping. Consiste en aplicar sobre la piel unos adhesivos rígidos o elásticos para modificar la movilidad de una articulación.
Colocamos el vendaje impidiendo o facilitando determinados movimientos durante un tiempo, con el objetivo de reducir la carga sobre una determinada estructura y favorecer su recuperación.
Originalmente se ha utilizado el vendaje con mucha frecuencia y durante períodos de tiempo muy largos. En la actualidad sabemos que la limitación de movimiento de forma prolongada lleva asociada más efectos secundarios que beneficios, por lo que acortaremos este tiempo en la medida de lo posible.